Este hombre sin hogar siempre ha sido artista en el metro, dónde se ha intentado sacar unas monedas de la mejor manera que sabía. El subterráneo de la ciudad fue su refugio durante mucho tiempo y fue donde consiguió salir de la depresión que tenía.
Una infancia en orfanatos y repudiado de las familias que lo adoptaron, esa ha sido la vida de López, que prácticamente se ha criado en la calle y "como no hay padre, ni madre, ni nadie que lo respalde", decidió cambiar su nombre por uno que significa "Dios es hermoso".
Se presentó al casting igual que muchas otras personas para poder aprovechar la oportunidad que le brindaban y salió con un total reconocimiento por parte del público y del jurado.
Los cinco millones de reproducciones que cosecha en Youtube son prueba de su talento, que dejó sin habla hasta a Ximena Sariñana, una cantante miembro del jurado. ¿Qué os parece su voz?
Con Información de AztecaTube @javieroliverct
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